La prostatectomía laparoscópica radical es uno de los métodos de tratamiento quirúrgico para el cáncer de próstata. La gran ventaja de la extirpación laparoscópica de próstata es la baja invasividad de dicha operación. ¿Quién puede ser operado de esta manera? ¿Cómo se realiza la prostatectomía radical mediante el método laparoscópico?
La prostatectomía laparoscópica radical es la extirpación quirúrgica de la próstata con vesículas seminales, fragmentos de los conductos deferentes y, en ocasiones, según la evaluación del riesgo de metástasis, los ganglios linfáticos circundantes.
La prostatectomía radical se realiza en pacientes con cáncer de próstata confinado a la próstata o con cáncer metastásico localmente avanzado, como introducción al tratamiento multimodal. El procedimiento de prostatectomía radical se realiza bajo anestesia general mediante método abierto, laparoscopia o con ayuda de robot.
El urólogo Łukasz Curyło de la clínica Cracovia SCM enfatiza que la elección de un método de tratamiento del cáncer de próstata depende de muchos factores, siempre va precedida de un diagnóstico y una entrevista precisos y, en última instancia, es una decisión individual de los médicos tratantes y del paciente.
El tratamiento de este tipo de cáncer depende, entre otras cosas, de:
- la edad del paciente
- la etapa de la enfermedad
- malevolencia
- coexistencia de otras enfermedades
Cada paciente debe estar completamente informado sobre la naturaleza de la enfermedad, las posibles formas de tratamiento y el posible riesgo de complicaciones o efectos secundarios de la terapia.
Hay muchas formas diferentes de tratar el cáncer de próstata: desde la vigilancia activa, pasando por la cirugía, hasta la radioterapia ampliamente comprendida, así como el tratamiento experimental mínimamente invasivo, por ejemplo, con HIFU. Uno de los métodos para tratar el cáncer de próstata es la prostatectomía radical, y el que se realiza por vía laparoscópica es actualmente el método de cirugía menos invasivo.
- La laparoscopia es actualmente el método quirúrgico menos invasivo. Las complicaciones ocurren con menos frecuencia que en el caso de la cirugía de órgano abierto, y el paciente no está expuesto a un largo período de convalecencia, gracias a lo cual vuelve rápidamente a la eficiencia operativa - explica el especialista de la Clínica SCM.
Prostatectomía radical laparoscópica: calificación
La calificación para el procedimiento está determinada por los resultados de las pruebas histopatológicas y el nivel de PSA, es decir, un antígeno prostático específico. Se complementan con estudios de imagen: resonancia magnética y tomografía computarizada, y cuando pueden estar implicadas metástasis óseas, también gammagrafía.
Prostatectomía radical con método laparoscópico: curso
El procedimiento de prostatectomía radical mediante el método laparoscópico consiste en introducir dispositivos especiales en el cuerpo del paciente a través de una incisión muy pequeña, de aproximadamente 10 mm, realizada en la pared abdominal, justo debajo del ombligo.
El conjunto de herramientas que se introducen de esta manera consta de ópticas que le permiten ampliar los órganos en la pantalla de un monitor médico (cámara laparoscópica) e instrumentos laparoscópicos, es decir, microherramientas especiales que le permiten incisión, escisión, transformación y extracción de fragmentos de tejidos enfermos. El aumento óptico obtenido durante los procedimientos permite una preparación muy precisa de las estructuras, y las herramientas electroquirúrgicas utilizadas permiten minimizar la pérdida de sangre durante el procedimiento.
Después de hacer las incisiones, el acceso a las herramientas se puede realizar sin rodeos con un dedo o con un globo Gaura.El espacio de trabajo se llena con dióxido de carbono introducido a presión. De esta forma se produce artificialmente un neumotórax, que deja espacio para las herramientas y reduce el sangrado durante la cirugía.
La cirugía de escisión de próstata comienza con la disección de su superficie anterior y su liberación de la fascia pélvica. Luego se corta la próstata del cuello de la vejiga.
En el siguiente paso, se prepara la sección más larga de la uretra, que luego se utilizará para conectar con la vejiga. El cirujano también diseca las vesículas seminales y los extremos distales de los conductos deferentes que están cortados y coagulados.
La última y más importante parte del procedimiento es restaurar la continuidad del tracto urinario, es decir, conectar la vejiga con el muñón uretral, que queda tras la extracción de la próstata. Una vez realizada la anastomosis, se realiza una prueba de fugas, que consiste en llenar la vejiga con una solución salina.
Los fragmentos de tejidos enfermos liberados y cortados, es decir, la glándula prostática con vesículas seminales, se extraen en una bolsa especial a través de la abertura previamente ensanchada debajo del ombligo.
Finalmente, se libera dióxido de carbono del espacio operatorio, se realiza la sutura y se aplica un apósito. El paciente tiene drenajes que se retiran unos días después de la cirugía.
Prostatectomía radical con método laparoscópico: contraindicaciones
Las limitaciones básicas de la cirugía son el estado general del paciente y las enfermedades que lo acompañan, p. Ej.
- enfermedad isquémica del corazón
- EPOC
- diabetes
Prostatectomía radical con método laparoscópico: complicaciones
Las posibles complicaciones incluyen:
- estrechamiento del cuello de la vejiga
- estrechamiento de la uretra
- pérdida de orina o fístula urinaria
- incontinencia urinaria
- impotencia