Los policías chinos han sido equipados con cascos con software que puede detectar temperaturas elevadas entre la multitud.
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El dispositivo escanea a los transeúntes en la calle. Ya desde una distancia de 5 metros, es capaz de detectar un aumento de la temperatura corporal. Entonces alerta automáticamente al policía. En la pantalla virtual interna, muestra los datos del ciudadano a la vez.
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La policía utiliza cascos inteligentes que patrullan las grandes ciudades chinas. El fabricante asegura que el dispositivo fue desarrollado específicamente para combatir la epidemia de coronavirus SARS-CoV-2.
Un casco de una película de ciencia ficción.
El casco está equipado con una cámara de infrarrojos que señala la detección de una persona con fiebre, uno de los síntomas del COVID-19, dentro de los 5 metros con una alarma. El sensor está configurado a una temperatura superior a 37,3 grados Celsius.
El sistema también muestra datos personales como nombre y apellidos en la pantalla virtual que ve el policía, ya que está equipado con tecnología de reconocimiento facial.
Mientras que la gente en China está comenzando a regresar lentamente al trabajo después del pico de la epidemia, y las ciudades y provincias individuales están abriendo sus fronteras, la policía no solo controla a los transeúntes sino también a los conductores. De esta forma, se trata de prevenir la propagación del coronavirus.
Comprueba lo que ve el policía en ese casco.
Dos policías con cascos futuristas patrullan las calles de la ciudad de Chengdu, con 16 millones de habitantes, en el suroeste de China.
El dispositivo se llama Smart Helmet N901. Fue producido en China por la empresa Kuang-Chi que opera en el campo de la alta tecnología. El portavoz del fabricante asegura que el equipo fue diseñado específicamente para ayudar a combatir la epidemia de coronavirus.
"El casco inteligente está diseñado para hacer frente a todos los desafíos preventivos en una epidemia. Detectará a cualquier persona con fiebre en un radio de 5 metros con un 100% de éxito", afirma el fabricante.
La máquina no solo escanea a todos individualmente, sino que también recuerda automáticamente los resultados.
"El sistema funciona de manera muy eficiente, proporcionando una distancia segura sin tener que acercarse a las personas", dice la empresa.
Un policía tardará 2 minutos en escanear la temperatura de unas 100 personas en una fila, por ejemplo. Un hospital grande necesitaría 10 cascos de este tipo para cubrir todos los sitios estratégicos de escaneo de temperatura, como entradas y salidas.
