La espasticidad es un problema que afecta a los músculos, principalmente porque se ponen demasiado tensos y limitan su movilidad. Las causas de la espasticidad pueden ser tanto las lesiones del tejido nervioso como la esclerosis múltiple o un tumor cerebral. La espasticidad suele ser un problema bastante grave porque puede provocar dolor intenso o dificultad para moverse.
La espasticidad es un término derivado de una palabra griega. spasticosque literalmente significa "tirar" o "tirar". Este trastorno afecta a los músculos y consiste en una tensión muscular excesiva acompañada de la aparición de resistencias al intentar realizar movimientos pasivos con los músculos implicados en la patología.
La disfunción muscular en forma de espasticidad puede ocurrir en pacientes de diferentes grupos de edad; el problema se puede observar en los niños básicamente desde el momento en que nacen, pero también puede ser una patología adquirida más adelante en la vida. Esta posibilidad surge de las diferentes causas potenciales de espasticidad.
Escuche sobre la espasticidad, conozca las causas y los síntomas de este problema muscular. Este es material del ciclo BUENO ESCUCHAR. Podcasts con consejos.
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Espasticidad: causas
La espasticidad se manifiesta como disfunción del tejido muscular, pero es causada por trastornos en el tejido nervioso. Las causas de la espasticidad son diversas afecciones en las que se dañan los elementos del sistema nervioso involucrados en el control de las actividades motoras, tales como: centros motores dentro de la corteza cerebral, tractos cortical-espinales (es decir, las conexiones nerviosas entre la corteza cerebral y la médula espinal) o la propia médula espinal. cable. De manera general, se puede decir que el daño de los llamados neurona motora superior.
En condiciones fisiológicas, los músculos reciben dos tipos de señales: algunas las estimulan para que funcionen, otras están diseñadas para inhibir la actividad muscular. En una situación en la que se daña cualquiera de las partes mencionadas anteriormente del sistema nervioso, se altera el equilibrio entre los dos tipos de estímulos: los estímulos que estimulan el trabajo de los músculos comienzan a dominar, lo que en última instancia da como resultado el hecho de que los estímulos sensoriales de intensidad mínima pueden conducir a la contracción muscular. y la aparición de espasticidad.
ImportanteExisten muchas afecciones diferentes que pueden dañar la corteza motora del cerebro, el tracto espinal cortical y la médula espinal. Las causas más comunes de espasticidad son:
- lesiones (que involucran la columna o la cabeza),
- sangrado en las estructuras del sistema nervioso,
- esclerosis múltiple,
- parálisis cerebral,
- tumores del sistema nervioso central,
- trazos.
Espasticidad: diagnóstico
La primera prueba que se realiza en pacientes con espasticidad suele ser una prueba neurológica. Además de las anomalías ya descritas, los neurólogos también pueden encontrar otras patologías en los pacientes, como un aumento de los reflejos tendinosos o la presencia de reflejos policlónicos (por ejemplo, en forma de temblor en el pie).
Otras pruebas que se realizan en pacientes que experimentan espasticidad dependen de la causa sospechada del problema. Por ejemplo, si un paciente ha tenido una lesión en la cabeza, o existe la posibilidad de que haya desarrollado un cáncer del SNC, se someterán a pruebas de imagen, como una tomografía computarizada o una resonancia magnética de la cabeza. Por otro lado, si se sospecha que la causa de la espasticidad puede ser la esclerosis múltiple, además del diagnóstico por imagen, el paciente también puede someterse a una punción lumbar, cuya finalidad será la de recoger y analizar la composición de su líquido cefalorraquídeo.
Espasticidad: tratamiento
El problema con estas disfunciones musculares es que, con mayor frecuencia, el daño al sistema nervioso que causa la espasticidad es irreversible. Sin embargo, la implementación de interacciones terapéuticas en pacientes con espasticidad es necesaria debido al hecho de que en ausencia de tratamiento existe un riesgo, p. la aparición de contracturas musculares permanentes y deformaciones relacionadas de las estructuras articulares y óseas en los pacientes. Además, la espasticidad puede provocar una intensidad significativa del dolor y también dificultar que los pacientes realicen actividades básicas, como la higiene personal o simplemente moverse.
El tratamiento de la espasticidad a menudo se asocia con diversas dificultades; sin embargo, los pacientes con este trastorno nunca deben interrumpir el tratamiento.
En el tratamiento de la espasticidad, se utilizan principalmente rehabilitación y farmacoterapia. Trabajar con un fisioterapeuta tiene como objetivo prevenir las contracturas mencionadas y sus consecuencias, pero también permitir que los pacientes mantengan la mayor movilidad posible. El tratamiento farmacológico de la espasticidad generalmente implica la administración oral de varios fármacos, como baclofeno, benzodiazepinas (por ejemplo, diazepam o clonazepam) o dantroleno. En pacientes con un curso de espasticidad extremadamente severo, es posible implantarles bombas especiales que administrarán continuamente baclofeno en el canal espinal.
Además de las ya descritas, en ocasiones también se utilizan técnicas quirúrgicas para tratar la espasticidad. A los pacientes se les puede inyectar toxina botulínica; esta sustancia paraliza la actividad muscular y reduce la espasticidad. La limitación de dicha terapia es que los efectos de la inyección duran solo unos pocos meses; después de este tiempo, para poder seguir observando los efectos del tratamiento, es necesario volver a administrar la toxina botulínica al paciente. También es posible utilizar otros procedimientos, como, por ejemplo, la rizotomía (es decir, cortar las raíces nerviosas que inervan los músculos afectados por la espasticidad). Actualmente, se realizan cada vez más intentos de utilizar la técnica de estimulación cerebral profunda (DBS) en el tratamiento de la espasticidad.
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