Para reducir el riesgo de desarrollar cáncer colorrectal, vale la pena mantener una línea. El sobrepeso y la obesidad aumentan el riesgo de cáncer.
La base de la dieta, que forma parte de la prevención del cáncer colorrectal, debe ser verduras y frutas (40-80 gramos al día) y productos de cereales (60-80 gramos al día).
- Las verduras son fuente de fibra, vitaminas C y E y ácido fólico.
- La fibra aumenta la masa fecal, acelera el tránsito intestinal y neutraliza los ácidos biliares.
El salvado de trigo es una bendición para los intestinos, lo que facilita su trabajo. Se pueden agregar al kéfir o al yogur.
Los productos lácteos son esenciales en una dieta para prevenir el cáncer de colon.
- El calcio contenido en los productos lácteos se une a los ácidos biliares.
La dieta debe ser baja en carnes rojas (menos de 80 g por día, que es una chuleta de tamaño mediano) y grasas animales.
- Los productos de origen animal son ricos en colesterol, que tiene propiedades cancerígenas.
También vale la pena limitar los alimentos ahumados y la carne y el pescado asados a la parrilla sobre fuego caliente, porque se forman en ellos compuestos nitro dañinos a temperaturas más altas. También se encuentran en embutidos y conservas.
Hazlo necesariamente»Mantenga su IMC en el rango de 20-25.
»Cuida la actividad física diaria (al menos una hora al día y una hora de entrenamiento intensivo una vez a la semana).
»Siga una dieta adecuada.