Si quieres proteger a tu hijo de la hipertensión arterial, infarto o ictus en el futuro, debes cuidarlo desde los primeros días de su vida. A continuación se ofrecen algunos consejos que le ayudarán a mantener sano el corazón de su bebé desde la infancia.
¿Qué es el caparazón de un joven? Este proverbio contiene la conocida verdad de que la salud de un niño debe cuidarse desde su nacimiento. También debe pensar en la prevención de las enfermedades cardíacas ahora.
»Amamante a su bebé, le dará inmunidad natural durante muchos años. Esto, a su vez, protege contra infecciones que pueden dañar el corazón. Además, en los bebés amamantados, el riesgo de enfermedad cardiovascular en la edad adulta se reduce hasta en una cuarta parte.
»No sobrealimente al bebé. Si está preparando mezclas, no ponga más polvo en el frasco del que necesita y no lo obligue a comer toda la cantidad a la vez. Haga que su bebé se acostumbre a beber agua sin azúcar.
»Asegúrese de que la dieta del niño mayor sea rica en verduras y frutas. Los dulces no pueden recompensar el buen comportamiento ni actuar como un consuelo, y la comida rápida no puede sustituir la cena.
»Anime a su hijo a jugar al aire libre y a practicar deportes. Los niños que hacen poco ejercicio suelen ser obesos y esto ejerce presión sobre el sistema circulatorio.
»Cuida el fortalecimiento de la inmunidad del niño. Las infecciones frecuentes pueden afectar negativamente al sistema cardiovascular, debilitar el corazón y las articulaciones.
»No imponga demasiadas responsabilidades al niño, actividades extras, no le exija que siempre sea lo mejor. Estresados, incluso los jóvenes a menudo desarrollan no solo hipertensión, sino también hipertrofia ventricular izquierda.